La Habana-Este mes de septiembre comenzará a funcionar un centro de llamadas de la Empresa Eléctrica de La Habana para reportar roturas, recibir informaciones complementarias y solicitar un aumento de la capacidad a través del número 18888, según informó la prensa nacional.
La nueva funcionalidad está equipada de moderna tecnología y funcionará las 24 horas del día. Sin embargo, la alta incidencia de averías eléctricas y cortes del suministro podrían poner a prueba en sus primeras semanas al servicio de reporte telefónico en una ciudad donde los apagones se han vuelto parte del paisaje urbano.
Los clientes también podrán solicitar a través de ese número un cambio en la capacidad eléctrica de su vivienda para ampliar de 110 a 220 voltios. Este servicio está siendo muy demandado en la Isla debido a la existencia de electrodomésticos importados tanto de Europa, de 220 v como de Estados Unidos y América Latina de 110 v.
Las llamadas serán atendidas por especialistas de la Empresa Eléctrica, lo cual constituye una novedad, según explica el diario Tribuna de La Habana “pues antes lo hacía la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (ETECSA)”.
Los clientes también podrán solicitar a través de ese número un cambio en la capacidad eléctrica de su vivienda para ampliar de 110 a 220 voltios
Al menos cuatro brigadas de diez operarios han sido capacitadas para hacerse cargo del servicio, declaró al periódico capitalino Juan Alexis Frómeta Luna, director de Capital Humano de la Empresa Eléctrica en La Habana. El entrenamiento, aseguró el funcionario, incluyó prácticas en actividad comercial, legalidad, ética profesional, operaciones del despacho de carga, técnicas de operaciones de la entidad y atención al cliente.
En la actualidad, la Organización Básica Eléctrica de la capital cubana cuenta con alrededor de 900.000 clientes entre el sector residencial y estatal que consumen el 26 % de la energía eléctrica que se produce en Cuba.
Frómeta Luna comentó también las proyecciones de la entidad para este año, entre las que se encuentran las inversiones dirigidas a mejorar el sistema soterrado. Este último sufrió una considerable rotura en la barriada de San Leopoldo la semana pasada que dejó sin electricidad a miles de familia y obligó a la colocación de los cables a través de postes en varias manzanas.
Los planes de la empresa también incluyen la construcción de nuevas subestaciones, el cambio de metro contadores y la instalación de cables de alto voltaje para asegurar mayor confiabilidad del servicio, aseguró el funcionario.